Autobús de Bath a York

Bath, una ciudad que recibe su nombre por sus emblemáticas termas romanas, es a menudo descrita como una de las ciudades más bonitas de Gran Bretaña. Con más de 2,000 años de historia y una arquitectura espectacular, Bath ofrece un sinfín de atracciones y actividades fascinantes.

Cuando estés en Roma, haz como los romanos, y cuando estés en Bath... ¡haz también como los romanos! Una de las cosas más populares que se pueden hacer en Bath es conocer los baños romanos de la ciudad. Situadas bajo la ciudad, las termas romanas son un impresionante ejemplo de cómo eran los baños públicos y los templos del mundo antiguo, con muchos artefactos y estatuas expuestos. Aunque no puedas bañarte en estas termas, visita uno de lo balnearios termales de la ciudad para vivir una experiencia casi auténtica.

Una de la autoras más famosas de Inglaterra, Jane Austen, hizo de Bath su hogar durante varios años. Los fans de su obra deberían visitar el Centro Jane Austen, donde se puede conocer la historia de su vida e incluso sentarse a tomar un té tradicional al estilo de la Regencia.

Viajar a Bath es sencillo, ya que está a sólo 32 kilómetros del aeropuerto internacional de Bristol. Los autobuses de Bristol a Bath facilitan mucho el traslado desde el aeropuerto. Para los viajeros nacionales, la estación de tren victoriana Bath Spa se encuentra a lo largo de la Great Western Railway y se puede llegar a ella desde varias ciudades a lo largo de la línea. Los servicios de autobús National Express y Megabus también realizan rutas a Bath desde todo el país.

La antigua ciudad de York, en el noreste de Inglaterra, ofrece aventura y emoción, así como oportunidades de sentarse y relajarse. Con más de 1,900 años de historia entre sus muros, la ciudad de York es hogar de una intrigante mezcla de historia romana y vikinga. Visita el Centro Vikingo de Jorvik para experimentar una recreación de la vida en una ciudad vikinga, así como dioramas de tamaño real y un paseo.

Para los que tienen un ojo arquitectónico, una visita a la Catedral de York es imprescindible. Con sus intrincadas vidrieras y sus elaboradas tumbas, esta catedral medieval es un lugar impresionante y a la vez tranquilo para explorar por un par de horas. York también cuenta con la calle más visitada de Europa: The Shambles. Esta calle, que se remonta a la época medieval, ahora alberga muchas tiendas, cafés y panaderías únicas e independientes, todas con la sensación de haber retrocedido en el tiempo.

Gracias a su posición en el corazón del país, acceder a York no podría ser más fácil. Los servicios de East Midlands y Northern Rail ofrecen un servicio de tren directo y rápido a la ciudad. York también está al alcance de cuatro aeropuertos internacionales y muchas carreteras principales para acceder en coche. Los servicios de estacionamiento en toda la ciudad hacen que no tengas que preocuparte por estacionarte en esas calles medievales.