Boletos baratos de tren desde Albuquerque a Chicago

Una ciudad rica en historia y cultura, Albuquerque ofrece una emocionante mezcla de elementos culturales latinoamericanos y de nativos americanos. La principal atracción de la ciudad es el centro histórico, el cual tiene una historia de más de 300 años. Con sus pintorescas calles empedradas y sus cobertizos de adobe de colores vivos, el barrio es una mezcla perfecta de las dos culturas, lo que lo convierte en una visión poco frecuente en Estados Unidos. El barrio también alberga la iglesia san Felipe de Neri, la edificación más antigua de la ciudad. Los amantes de la naturaleza encontrarán una agradable sorpresa en el ABQ BioPark, ya que cuenta con un acuario, una playa, un zoológico y un jardín botánico... suficiente diversión para un día completo. Si quieres aprender más sobre la herencia de los nativos americanos, el Indian Pueblo Cultural Center es el lugar que debes visitar.

La escena gastronómica de Albuquerque está entre las más dinámicas en sus alrededores. Sus platillos típicos son fuertes y picantes con un toque distintivo de Nuevo México. El mejor lugar para disfrutar de estos platillos es el High Noon Restaurant and Saloon, favorito de los locales. No olvides también probar el panorama vinícola único de la ciudad, y si deseas probar diferentes variedades de vino, el Albuquerque Wine Festival es una gran oportunidad para hacerlo.

El Alvarado Transportation Center es la estación de autobús y tren más concurrido de la ciudad. El servicio de autobús de Greyhound y Jefferson Lines te llevará de Albuquerque a varias ciudades, como Phoenix, Dallas o incluso Chicago. En cuanto a los trenes, las líneas locales de Amtrak te llevarán a Denver, Santa Fe, Salt Lake City y más allá. El principal aeropuerto de la ciudad es el Albuquerque International Airport, a solo 3 millas (5 kilómetros) al sureste del distrito financiero central.

Conocida por su arquitectura innovadora, su contribución cultural al jazz y a la música house, la variedad de lugares de interés y experiencias, y por supuesto a su irresistible pizza al estilo Chicago, esta ciudad es uno de los mejores destinos de vacaciones para los millennials.

No puedes superar las vistas de la ciudad y el lago Michigan desde el SkyDeck en la Torre Willis; a más de 1,300 pies (400 metros), esta es la plataforma de observación más alta de los Estados Unidos. Tómate una selfie en el Bean en Millennium Park, luego, pasea por los muchos museos en el cercano Grant Park. Navy Pier es un lugar turístico muy popular por sus parques, restaurantes y atracciones sobre el lago Michigan. Los fanáticos del béisbol encontrarán el paraíso en Wrigleyville, hogar del Wrigley Field de los Cachorros de Chicago y la abundancia de bares deportivos.

Los enormes parques de Chicago ofrecen un sinfín de posibilidades para realizar actividades al aire libre en medio de un hermoso escenario de la ciudad. Muchas empresas ofrecen rentas de kayak o paseos en barco por el río Chicago, con tours especiales el Día de San Patricio, donde tiñen todo el río de color verde. Cuando estés listo para comprar algunos souvenirs de tu fantástico viaje, dirígete a las tiendas de marca en el Magnificent Mile o compra local en vecindarios como Andersonville y Wicker Park. Y no pierdas la oportunidad de reírte como nunca en el teatro The Second City, famoso por lanzar las carreras de comediantes como Tina Fey y Stephen Colbert.

Chicago es uno de los centros más grandes de transporte en el medio oeste, y ofrece fácil acceso a destinos cercanos, ideales para viajes de un día, así como vuelos internacionales desde dos aeropuertos. Gracias a la variedad de estaciones de trenes y autobuses por toda la ciudad, llegar a la Ciudad de los Vientos, es pan comido.