Las cataratas del Niágara han capturado a millones de visitantes con su asombroso esplendor panorámico, sus ensordecedores rugidos y sus brillantes arco iris. El dato más asombroso de las cataratas del Niágara es que cada segundo fluyen casi cuatro mil toneladas de agua sobre ellas. Además, las cataratas del Niágara son el parque estatal más antiguo de Estados Unidos y deberían estar en la lista de deseos de cualquier persona.
El restaurante y hotel más cercano a las cataratas del Niágara es el Red Coach Inn. Cada habitación tiene un aspecto exquisito e histórico, y te parecerá que se está alojando en un castillo. Asegúrate de pedir la legendaria tostada francesa de creme brulee. Es aún más deliciosa de lo que parece.
Para llegar a Niagara, viaja al Aeropuerto Internacional Niagara Falls. FlixBus, Adirondack Trailways, y más, también ofrece servicio de autobús a la zona con rutas de Buffalo, Nueva York, Binghamton, Rochester y más. Los trenes de Buffalo a Niagara Falls también son populares, y Amtrak tiene varias líneas desde Boston, Chicago, Washington y Toronto hacia Niagara Falls.