Tren de Aquisgrán a Érfurt

Situada cerca de las fronteras holandesa y belga en el oeste de Alemania, Aquisgrán es una verdadera joya oculta. Esta ciudad histórica, que en su día fue un balneario romano, se remonta al siglo I y posteriormente se convirtió en la residencia favorita del rey franco Carlomagno. Seguramente también te espera una experiencia real en tu visita a Aquisgrán.

El edificio más llamativo de esta ciudad es sin duda la Catedral de Aquisgrán. Esta catedral es el primer lugar de Europa en recibir el prestigioso estatus de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, en parte porque es una de las catedrales más antiguas de Europa. La catedral es también el lugar de descanso final de Carlomagno, aunque se desconoce el paradero exacto de sus restos.

Después de un día de paseo por la ciudad, visita las Carolus Thermen, o baños termales, para sumergirte en las aguas minerales calientes que tanto amaban los romanos. Elige entre una gama de piscinas interiores o exteriores, saunas y tratamientos de spa para disfrutar de lo que los romanos llamaban "salus per aquam" o "salud por agua".

Por su situación fronteriza, es fácil llegar a Aquisgrán desde Alemania, Holanda y Bélgica. Frecuentes trenes internaciones y nacionales circulan por las estaciones de tren, mientras que al aeropuerto internacional llegan muchas de las principales aerolíneas. Las líneas de autobús, como FlixBus y Sindbad ofrecen viajes terrestres asequibles desde muchos destinos. Algunas de las rutas más populares a Aquisgrán salen desde Berlín, Ámsterdam y Bruselas.

Erfurt es la capital y la ciudad más grande del estado alemán de Turingia. La mayoría de la ciudad fue construida y diseñada en la Edad Media, así que prepárate para ser encantado por las estrechas calles peatonales, los pintorescos puentes y los magníficos espacios verdes como el Egapark. Mientras caminas por el centro de la ciudad, mantén los ojos abiertos para ver hasta 25 iglesias de diferentes estilos arquitectónicos. Una vista única en Erfurt es el Krämerbrücke, o puente de los mercaderes, posiblemente la atracción más popular de la ciudad. Este puente arqueado del siglo XV tiene casas construidas en ambos lados, en un diseño que era común en la Europa medieval.

Como es de esperarse de una ciudad grande, Erfurt no decepciona en cuanto a opciones gastronómicas. Los restaurantes locales más populares que deberías considerar visitar son EAT Erfurt y Gasthaus Feuerkugel. O simplemente detente en cualquiera de los numerosos puestos que ofrecen Thüringer Bratwurst, una delicia regional.

Aunque existe un pequeño aeropuerto para Erfurt, las opciones de rutas son bastante limitadas. La mayoría de los pasajeros aéreos viajarán a través del aeropuerto de Fráncfort y conectarán con Erfurt por medio de autobús o tren. La estación de tren de Erfurt es uno de los puntos centrales del sistema ferroviario alemán Deutsche Bahn. La mayor parte del servicio de tren hacia y desde Erfurt se realiza en trenes de alta velocidad, por lo que los viajes a Múnich, Berlín y Nuremberg apenas requieren tiempo. FlixBus conecta Erfurt a muchos otros destinos vía viajes de autobús asequibles.

Hay una estación de tren desde donde los trenes salen de Aquisgrán a Érfurt. La estación de salida más transitada en Aquisgrán que opera esta ruta es:

Hay una estación de tren donde los trenes llegan a Érfurt desde Aquisgrán. Estas son las estaciones de llegada más concurridas en Érfurt: