Portland es la mayor ciudad de Maine y, por ello, el principal centro de transporte del estado. Desde Portland, los viajeros pueden llegar fácilmente a destinos como Boston, Albany, e incluso Gainesville, Texas, mediante una combinación de autobuses, trenes y transbordadores. Y hay mucho por hacer en la ciudad, incluso si estás viajando solo.
Desde su fundación en 1786, Portland se ha recuperado de nada menos que cuatro grandes incendios, creando una fascinante mezcla de lo antiguo y lo nuevo. El Distrito de las Artes, situado en la parte alta de la calle Congress, cuenta con importantes colecciones de museos, como el Museo de Arte de Portland, la institución artística pública más antigua del estado.
El West End alberga la mayoría de los edificios históricos de Portland, lo que crea una sensación de viejo mundo. Sin embargo, la presencia de varias escuelas y universidades de gran prestigio hace que Portland siga siendo una de las ciudades pequeñas más dinámicas de los Estados Unidos.
Tras varios años de sufrimiento, el distrito del Viejo Puerto ha vuelto a ser el centro de la acción. Sus atractivas calles adoquinadas y sus almacenes de ladrillo rojo del siglo XIX albergan ahora una selección de cafés, bares y tiendas de moda. Al mismo tiempo, todavía es posible contemplar la tradición consagrada de los pescadores que descargan sus ollas de langosta en la playa.
Al este del centro, encontrarás Munjoy Hill. Es un barrio con fuertes raíces irlandesas e italianas, lo que lo convierte en uno de los mejores lugares de Portland para disfrutar de la auténtica cocina de Italia. No es de extrañar que hayamos nombrado a Portland uno de nuestros principales destinos vacacionales en Maine.